
El fotógrafo Enrique Rencoret presenta Memoria Visual, una exposición itinerante que recorre Puerto Varas, Llanquihue y Frutillar con una mirada contemporánea sobre la arquitectura patrimonial de la cuenca del Lago Llanquihue. Conversamos con su autor sobre el origen del proyecto, el rol de la fotografía en la conservación y la invitación a la comunidad a volver a mirar su patrimonio.
¿Cómo nace Memoria Visual y qué te motivó a mirar el patrimonio arquitectónico de la cuenca desde una lente actual?
Como fotógrafo de paisajes , me tocó recorrer muchas localidades en la cuenca del lago Llanquihue y en una de esas muchas salidas me encontré con una casona de más de 110 años a la que le hice un registro fotográfico; fue un encuentro con la historia, la tradición y el legado de los antiguos artesanos; tan solo unos meses después de ese maravilloso encuentro esa casona centenaria era demolida, desapareciendo por completo del paisaje rural. Es en ese instante que nació sin proponérmelo, Memoria Visual; con el concepto urgente de preservación visual de construcciones patrimoniales que poco a poco van desapareciendo de nuestros campos y ciudades. Después de 7 u ochos años de trabajo compartido en redes sociales, los mismos seguidores comenzaron con la idea de hacer una exposición.
Cuando hablas de “memoria visual”, ¿a qué te refieres y qué emoción o reflexión esperas provocar en quienes visiten la muestra?
Cada una de las fotografías que compartí en redes sociales, despertaba el imaginario personal y colectivo; las personas comenzaron a compartir sus recuerdos, sus anécdotas de casas, galpones , capillas y barrios enteros. La imagen hacía revivir la memoria de épocas pasadas de toda una comunidad; pero también cada fotografía servirá para conservar en imágenes , nuestro patrimonio arquitectónico para nuestras generaciones futuras; es más, algunas de las fotografías expuestas son de casas ya demolidas, por lo que esas imágenes se han convertido en un verdadero documento visual a destacar.

¿Qué criterios seguiste para seleccionar las obras y los lugares fotografiados?
La verdad no hubo un criterio especial de selección de locaciones; si hice hincapié el sectores rurales donde tenemos un patrimonio arquitectónico que aún sobrevive y es un patrimonio mas bien desconocido, alejados muchas veces de los barrios patrimoniales decretados como tal. Lo mío fue un viaje personal por la cuenca del lago Llanquihue buscando su riqueza histórica ; también debo reconocer el aporte de seguidores de redes sociales que compartían datos de construcciones dignas de registrar.
En lo técnico y lo estético, ¿qué decisiones marcaban el resultado? y ¿por qué esas elecciones dialogan bien con el patrimonio de madera del sur de Chile?
Mi fotografía como la definió un fotógrafo español Marco Rubio en un podcast de fotografía ; posee dos dimensiones importante a destacar; una dimensión conservacionista desde una mirada personal e íntima. Una búsqueda por la estética fotográfica, una preocupación por la composición, por la luz y el revelado final; una intención de tratar de hacer buena fotografía , mas que un mero registro de construcciones antiguas ; una fotografía con sentimiento, marcada por la sensibilidad del autor por la pérdida de nuestro pasado arquitectónico. Esa es la clave de mis fotografías, más allá de un correcto manejo técnico, es cómo el entorno sensibiliza de alguna manera al artista y cómo éste trata de compartir ese sentimiento a los demás. Pienso que esa dimensión personal e íntima se logró transmitir en gran medida a la comunidad y captó el mensaje visual de manera maravillosa.

La muestra es itinerante y busca vincular a la comunidad escolar y docente. ¿Cómo serán esas visitas/mediaciones y qué aprendizajes te gustaría que se lleven niñas, niños y jóvenes?
Uno de los objetivos importantes que tiene esta exposición, es hacer participar a la comunidad docente y escolar en este proyecto, para demostrar a los niños y jóvenes lo importante y destacable que tiene su entorno, su barrio; la casa del amigo, el galpón que se logra ver por la carretera, la vieja capilla de algún pueblo sureño; es proyectar en ellos que lo cotidiano del paisaje que los rodea es importante para su historia, pasado e identidad; para esto he tenido el respaldo de la Casa de La Cultura de Puerto Varas, la Ilustre Municipalidad de Llanquihue y el Colegio Puerto Varas, que han ido organizando encuentros con la comunidad escolar que apuntan en ese sentido.
¿Qué tensiones ves hoy entre desarrollo urbano y resguardo patrimonial en la cuenca del Lago Llanquihue, y qué papel puede jugar la fotografía en esa conversación?
El desarrollo urbano y su efecto en la desaparición del patrimonio arquitectónico es un tremendo tema no solo a nivel local, sino a nivel nacional e incluso mundial. Desgraciadamente no soy muy optimista en este sentido; la conservación física de nuestro patrimonio arquitectónico requiere de políticas efectivas, eficientes y grandes recursos económicos; que son muy difíciles de conseguir. En cada uno de mis recorridos por distintos pueblos y ciudades, los actuales dueños de muchas casonas centenarias me comentaban que es muy costoso mantener sus casas en buenas condiciones y el Estado en ese sentido, es más bien un Estado ausente que presente. Es quizás ese sensación de perdida irreparable, difícil de revertir, lo que hace surgir el interés y sentimiento del artista; generar conciencia en el tema en gran medida, pero también un rescate y preservación visual con mirada de futuro.

¿Por qué no perderse muestra itinerante durante los próximos meses?
No hay que perderse la muestra itinerante de Memoria Visual porque cada una de sus presentaciones permite acercarse a la arquitectura patrimonial de la cuenca del Lago Llanquihue bajo una mirada fotográfica actual. El proyecto cuenta con un importante respaldo de la empresa privada y su itinerancia se irá compartiendo a través de las redes sociales de los organizadores, lo que permitirá seguir cada una de las locaciones y actividades programadas. Además, se espera contar con cobertura en medios regionales, lo que garantiza una amplia difusión y la posibilidad de acompañar este recorrido cultural en distintos momentos y lugares.
Ficha rápida
- Inauguración: 4 de septiembre, 19:00 hrs — Hotel Wyndham Petra, Puerto Varas (ceremonia privada)
- Galería Bosque Nativo: 17 septiembre –04 de octubre
- Municipalidad de Llanquihue: todo octubre
- Teatro del Lago: 6–15 de octubre
- Galería CAMM: noviembre
- Hotel Cabañas del Lago: todo diciembre
Patrocinan: SERNATUR; Los Lagos Travel; Teatro del Lago; Colegio Puerto Varas; Municipalidad de Llanquihue; Casa de la Cultura de Puerto Varas; Municipalidad de Frutillar; Galería Bosque Nativo; Galería CAMM; Combas.
Auspician: Cecinas Llanquihue; Clínica Puerto Varas; Hotel Wyndham Petra; Hotel Cabañas del Lago; Keepex; Cumbre Gases; Raíz Austral.